En el Coche como Navegador
- miércoles, octubre 19, 2005
- por
- @LuisBermejo
El domingo pasado mi dueño me sacó de paseo. Por primera vez iba a probar mi función de sofá TOMTOM 5.1. Su gran duda era si el soporte de rejilla ARKOM mod. CM-160 que compró hace meses para su antigua JAM iba a soportar mi tamaño y peso, además de si mis botones, altavoces y acceso de auriculares y carga quedarían libres.
Así que nada mas llegar a su coche, pudo comprobar que todo quedaba accesible, incluso nada obstruía mis dos altavoces, y mi peso, era perfectamente soportado por el dispositivo, además de quedar firmemente sujeta al mismo,
Así pues, me conectó al cargador del encendedor, conectó el GPS, ejecutó el checkpoint y lanzó el TOMTOM. Calculó la ruta y una vez fijada, rápidamente, dado mi procesador, empezamos a andar.
Dada mi gran pantalla pudo observar que dando rápidos vistazos a la misma, toda la información suministrada por el navegador era perfectamente visible y legible sin tener que fijar la vista demasiado ni acercarse desde la posición de conducción habitual.
Además, poniendo música a un volumen normal, las instrucciones del navegador eran perfectamente entendibles, gracias a mis dos altavoces que confieren un volumen alto a los sonidos.
Por el contrario, al final del trayecto, le decepcionó que el cargador mantuviera simplemente la carga, probablemente debido a que siempre llevó la pantalla encendida. Imagino que habrá maneras de, investigando un poco, hacer apagar la pantalla para que así pueda cargar algo...
Así que nada mas llegar a su coche, pudo comprobar que todo quedaba accesible, incluso nada obstruía mis dos altavoces, y mi peso, era perfectamente soportado por el dispositivo, además de quedar firmemente sujeta al mismo,
Así pues, me conectó al cargador del encendedor, conectó el GPS, ejecutó el checkpoint y lanzó el TOMTOM. Calculó la ruta y una vez fijada, rápidamente, dado mi procesador, empezamos a andar.
Dada mi gran pantalla pudo observar que dando rápidos vistazos a la misma, toda la información suministrada por el navegador era perfectamente visible y legible sin tener que fijar la vista demasiado ni acercarse desde la posición de conducción habitual.
Además, poniendo música a un volumen normal, las instrucciones del navegador eran perfectamente entendibles, gracias a mis dos altavoces que confieren un volumen alto a los sonidos.
Por el contrario, al final del trayecto, le decepcionó que el cargador mantuviera simplemente la carga, probablemente debido a que siempre llevó la pantalla encendida. Imagino que habrá maneras de, investigando un poco, hacer apagar la pantalla para que así pueda cargar algo...
Y así fue, investigando por los foros pudo leer cómo a otros usuarios les ocurría lo mismo y daban la solución, apagarme, enchufar al cargador del coche y encenderme... Curioso, pero según parece ocurre igual con algunas de mis primas...
Besitos...
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